¿Qué sueles desayunar antes de venir al trabajo? ¿Eres de café rápido o de tomarte tu tiempo?
No desayuno mucho, bueno… en casa, nada. Me gusta ir al bar y tomarme un café solo con hielo, y hablar con el grupo que tomamos café todos los días. Esa es la forma de despertarme y asumir el reto del trabajo con optimismo.
¿Qué objeto no puede faltar en tu taquilla de trabajo?
Un cuaderno, para apuntar todo lo que me pasa o cosas que necesito acordarme.
¿Qué haces cuando sales de trabajar para desconectar un poco?
Llego a casa, meriendo un poco y hablo con mi pareja y, si no está, veo un poco la tele, sobre todo programas de concursos o me pongo a cocinar, que también es algo que me desestresa.
¿Cómo sueles organizarte los fines de semana?
Soy de estar todo el día por ahí, sobre todo los sábados. Normalmente voy a bailar y, luego, nos quedamos a comer por ahí. Y ver cosas, es muy importante para mí estar por ahí.
Luego, el domingo, ya es otra cosa: Preparar comidas, hacer la casa y, cuando acabo, ver una buena película o serie en mi sofá, que es otra parte importante de mi vida.
¿Tienes alguna manía o costumbre que no perdonas en tu rutina diaria?
La puntualidad, y llevo una rutina de trabajo que siempre tengo que hacer todo más o menos igual. Por eso, me gusta llegar pronto a trabajar pues, luego, a las 9h, empieza a sonar teléfono, correos, etc.
¿Cómo fue tu primer día de trabajo en nuestro Grupo? ¿Cómo lo recuerdas? Cuéntanos un poco tu trayectoria hasta llegar a nuestros días.
Lo recuerdo mucho, el mismo día que me llamo Dibaq, me llamaron de una carpintería y decidí venir aquí, y cuando llegué, dije: “Me he equivocado de trabajo… ¿cómo va a ser rentable hacer comida para mascotas?”, Y… mira, 30 años después, el equivocado era yo. Si no que vamos a mucho y hacemos unos productos magníficos, también recuerdo a Capitán, que me dijo: “Hagas lo que hagas, tú con un cepillo en la mano”, la verdad es que siempre he tenido buenos compañeros.
Cuando llegué aquí, dije: “Me he equivocado de trabajo… ¿cómo va a ser rentable hacer comida para mascotas?”, Y… mira, 30 años después, el equivocado era yo
¿Qué es lo que más valoras del equipo con el que trabajas actualmente?
Su compromiso. Y les pido que apuesten por el producto, todo lo demás no es importante. Lo importante son nuestros clientes y las Personas.
Todo lo demás tiene arreglo.
¿Cuál dirías que ha sido tu mayor reto dentro de la empresa?
Llegar hasta donde he llegado, sin el apoyo de mis compañeros y de la Familia Tejedor Lázaro, no habría llegado a nada. Mil gracias a todos.
¿Cómo describes un “buen día” en la fábrica?
Tranquilo, sin averías, ni problemas, correos, llamadas… pero como eso no suele ocurrir, llevarlo de la mejor manera posible.
Si tuvieras que dar un consejo a alguien que acaba de entrar, ¿qué le dirías?
Que Grupo Tejedor Lázaro da oportunidades a todo el mundo, que me mire a mí: han apostado por mí y espero devolver toda es confianza que han depositado en mí. Es una gran empresa.
¿A quién nominas para la próxima entrevista?
Cuéntanos por qué crees que su historia también merece ser contada.
Sara del Rey, creo que es una persona que puede aportar mucho. La conozco de hace años. Hace un trabajo magnifico y nos facilita el trabajo a los demás.
